El hombre en la poesía

* No hubo búsqueda del rasguido salvador. Hubo, apenas, vaguido de insomne. La perla engullía sus propios pétalos, a toda prisa, para encontrar su corazón y devorarlo de un trago. Un hambre de mar descontrolado. Aquella perla infeliz, presa de una hipnosis suicidante, anhelaba el invierno.- MARCELO JUAN VALENTI Rosario-Argentina * Extraído del libro PRESAGIO DE LA REINA CIEGA, Editorial LOS LANZALLAMAS Foto de tapa y contratapa: FEDERICO TINIVELLA Año 2002 OJOS desarmado hasta “no-decir” y con los huesos llenos de polvo o harina de carne como si de molinos se tratara la piedra sigue girando el pasado deambula en espasmos y se derrama demasiada historia entonces transcurrir en pedazos sin que alguien lo note el pecho se abre como una puerta adentro paredes mohosas de una casa que no dilata donde aun está la grieta que surca la estructura y unos ojos -otrora capaces de cantar- mudos se cierran ALVARO OLMEDO Y SI y si los huesos crujen cuando se ampara la mariposa y si se desgarra la lágrima bajando por la carne surcada y si los versos son daga y ungüento y si se derrumba el muro de la historia y la tierra trémula cambia su perfume entonces no preguntes amor ahí está la respuesta ALVARO OLMEDO San Juan-Argentina PARAÍSO MODESTO * A veces, sueño con mi pequeño paraíso: voy por un sendero en el campo, en la lejanía: arboledas y niebla, mientras la mañana se suspende en la inquietud placentera de aguardar el sol y a los amigos queridos para reunirnos alrededor de la mesa en la casa situada en la campiña.- SANTIAGO BAO San Fernando-Buenos Aires Argentina *fuente:DESPLIEGUES Fondo Editorial Rionegrino RESURRECCIÓN Tenía tatuada mi piel con mañanas, sin mañanas. Los hoy, gozaban la espera de inicios sin comienzos en los espacios heridos de días sobornables. Vivía a expensas del hábito de la negociación, atado a los relojes que marcan las horas vacías de instantes sin presente. Pero el destino, siempre alerta como un puñal que abarca la honda simetría del humano, hizo que cayera desde el límite exacto en que se hunde el abismo en la oscuridad y el miedo. Me sentí encadenado al último refugio de las horas, y comprendí mi endeble existencia. Ya no tengo tatuada mi piel con mañanas sin mañanas, porque aprendí que hoy puedo soñar a pleno día con un jardín de infancias que retornan del olvido. Hoy, me siento peregrino de mi propia resurrección, y eso basta para comenzar de nuevo desde el principio. VÍCTOR HUGO TISSERA
4 comentarios
deliteraturayalgomas -
Betty
Lily Chavez -
Saludo para todos ellos.
deliteraturayalgomas -
Un gran abrazo
Betty
Analía Pascaner -
Felicitaciones y siempre adelante con la difusión de la literatura.
Un beso y mi cariño
Analía