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Bienvenida, Delia Cristina Campello

Bienvenida, Delia Cristina Campello

        PASIÓN SIN LÍMITES

 

   Tarde se encontraron para amarse, ella era su secretaria, mujer libre y solitaria, él un magnate empresario, casado con toda la ley.

   Se querían intensamente, se citaban a escondidas, unidos en sentimientos, en gustos, en pensamientos y con gran afinidad.  Sus corazones entrelazados palpitaban al unísono, la sangre ardiente les fluía por la piel, en sus ojos se reflejaba el amor que vivían, pero ambos no soportaban tener que separarse tan solo por un instante y premeditaron un plan.

   El cielo los escoltaba con densos nubarrones, las flores se cerraron, las hojas fueron arrancadas de los frondosos árboles por remolinos de vientos y las aves inquietas volaban en círculos, auscultándolos.

   Los Alpes suizos se tiñeron de rojo, seguidos de una densa humareda, y como si fuesen dos pájaros ligados por sus alas se arrojaron al vacío.

   Al cabo de un rato, sobrevino el silencio, en el atardecer de ese día sus cenizas se esparcían cuestas abajo, purificándose con la nieve inmaculada que cubría el paisaje, se habían suicidado al estilo bonzo, quemándose en la pasión que los unía.

 

       DELIA CRISTINA CAMPELLO CASCO

            Rosario-Argentina

 

6 comentarios

Marita Ragozza de Mandrini -

Tanta pasión que necesitó la nieve de los Alpes. Atrapante. Felicitaciones a la autora.

Blanca Basile -

Final sorpresivo, espiritual y mágico.
Un saludito
Blanca

Lucas Tejedor -

Seductora poesía, algo corre por las venas de esta escritura.

Muy buena!

Jorge Lus Estrella -

A la flauta, eso sí que es amarse apasionadamente. Se pasaron, che. Ojo, se podría filosofar mucho a partir de este texto pero su lectura me atrapó y eso es lo que vale.

Lily Chavez -

Bienvenida Delia, siempre otro modo, otra mirada es una renovación de voces que suma. Y como dice Aristóbulo, finalmente esa narrativa es también poesía.

Lily Chavez

Aristóbulo -

Bienvenida, Delia, al sitio de Betty.
Delia, me gustan las historias de amor y ésta en especial es muy apasionada y el final es un poema, te felicito.
Un apretón de manos, otro para los del blog.
Aristóbulo